Para que las generaciones futuras no tengan que pasarse horas interrogando un texto, y así sean más estúpidas (o tengan más tiempo para dormir)

28/8/08

Lista de personajes de Los hermanos Karamazov

Unos meses atrás (fos años; esto pertenecía a un viejo blog) se me ocurrió la loca idea de escribir breves reseñas de todas las personas mencionadas en la historia, incluso aquellas que ni siquiera tienen participación. Esta lista es el resultado de mi tarea. Faltan unos diez seres sobre los que no podía escribir absolutamente nada. (La mayoría eran conocidos de Kolia, que habló muchísimo mientras caminaba con Smurov hacia la casa de Iliucha; también hay un amigo de Iván, Korovkine.) Me limité a escribir los hechos, de modo que no esperen gran penetración de mi parte. Sirve para no olvidar lo que hizo cada personaje cuando uno decide leer un trocito de la historia cada tanto. Está ordenado por órden alfabético (aunque me tomé algunas libertades con los nombres y decidí agrupar a los monjes, a los padres y a las viudas en la m, la p y la v respectivamente), y bastante prolijo. Debí dejar algunos datos de lado, porque si no las 11 hojas serían 40. Si alguien alguna vez descubre un error, por favor, avise.



Adelaida Ivanovna Miusov
fue la primera esposa de Fiodor Pavlovitch. Se casó con él con el fin de emanciparse de su familia.
Esta joven de carácter fuerte desagradaba profundamente al criado Grigori, que se casó con su criada Marta Ignatievna.
Aunque a Adelaida Fiodor sólo le inspiraba desprecio, tuvo con él al primer hermano Karamazov, Dmitri.
Adelaida fue infeliz con su marido, a quien golpeaba, y terminó huyendo de su casa con un estudiante pobre para acabar muriendo en Petersburgo.

Ágata era a sirvienta obesa y picada de viruelas de la señora de Krasotkine.

Ágata Ivanovna era la hija mayor de un teniente coronel del cual Dmitri era subordinado, y medio hermana de Catalina Ivanovna.
Cuando conoció a Dmitri, que la describe como una amiga pura, Ágata vivía con su padre y su tía materna, y realizaba trabajos de costurera de manera gratuita. Vivaz y humilde, adoraba a Catalina Ivanovna, razón por la que se indignó cuando escuchó la propuesta que el mayor de los hermanos Karamazov realizó respecto a su hermana.
Evitó que su padre se suicidara.

Agrafena Alejandrovna Svetlova (Gruchegnka) era una mujer joven, astuta, seductora y descarada. Aunque no se sabía mucho de su vida, en la ciudad se rumoreaba que procedía de una honorable familia de profundo espíritu religioso. En su juventud fue engañada por la persona a la que amaba, un oficial que la dejó y se casó con otra. Luego de esto la joven quedó en la miseria; fue gracias a Samsanov que logró abandonar la capital del distrito y su infortunada situación. Haciendo uso de su inteligencia y el dinero y los consej0s proporcionados por su protector, Agrafena Alejandrovna logró sacar provecho de sus negocios e incrementar su capital. Vivía en el barrio más animado de la ciudad, en la casa de la viuda del comerciante Morozov.
Gruchegnka fue una importante causa de la disputa entre Fiodor y Dmitri Karamazov. Jugó con ambos hombres, pero cuando se enteró del regreso del oficial al que había amado decidió volver con él, a pesar de sus dudas, el deseo de venganza y la cólera que sentía contra sí misma. Sintió desencanto hacia su ex amante, y cuando Dmitri fue a buscarla le declaró su amor. Esa noche en la que arrestaron a Mitia contrajo una larga enfermedad.

Alexei Fiodorovitch Karamazov (Aliocha) es presentado por Dostoievski como el héroe de la historia. Hijo de Fiodor Pavlovitch y Sofía Ivanovna, es el tercero de los hermanos Karamazov. Fue educado por Eutimio Petrovitch Polienov, quien le expresó un gran afecto. Pudoroso y poco rencoroso, Aliocha recordó siempre a su madre Sofía. Luego de la muerte de su protector fue a vivir con dos parientas lejanas de Eutimio, a las que avisó un año antes de terminar sus estudios que volvería a su ciudad natal. Una vez junto a su padre, le indicó que entraría de novicio al monasterio del pueblo. Permaneció allí hasta la muerte del starets Zósimo, a quien admiraba, por petición del líder espiritual.

Ana Fiodorovna de Krasotkine era la madre de Kolia, una mujer alegre y cariñosa que rondaba los 30 años. Era viuda: su marido había muerto cuando ella tenía dieciocho años, días después de haber dado a luz a su único hijo.

Andrés era el cochero del carro alfombrado que había sido preparado para el viaje de Mitia a Mokroie en pos de Gruchegnka.

Atanasio era el ordenanza de Zósimo durante su permanencia en el cuerpo de cadetes. Fue golpeado por Zenob muchas veces, y fue una de esas golpizas lo que hizo que Zósimo reconsiderara sus conductas y decidiera, finalmente, hacerse monje. Después de dejar a Zósimo, Atanasio se casó y tuvo dos hijos, a los que mantuvo mediante su trabajo en la industria de cestería.
Años después de dejar el cuerpo de cadetes, el starets y Atanasio se encontraron, y Zósimo le confesó que gracias a él había tomado ese camino.

Belmissov era la prima de la señora de Khokhlakov. Su esposo estaba en la mina y su prima le aconsejó que se dedicara a la cría de caballos, con lo que tuvo un próspero negocio.

Bielavski era un caballero guapo y rico que abofeteó a Fiodor Pavlovitch en presencia de su esposa Sofía Ivanovna, a quien hacía la corte.

Catalina era la sirvienta de la esposa del médico que alquilaba un departamento de dos piezas a la señora de Krasotkine. Hizo saber a su patrona que estaba embarazada recién un día antes de dar a luz.

Catalina Ivanovna Verkhovtsev (Katineka, Katia, Katka) era la hija menor de un teniente coronel del cual Dmitri era subordinado, y medio hermana de Ágata Ivanovna. Era hija de una dama noble y de ilustre apellido que había sido la segunda esposa del teniente. Cuando conoció a Dmitri acababa de regresar de un pensionado aristocrático de la capital. Sentía desdén hacia el mayor de los hermanos Karamazov, pero ante una deuda de su padre, aceptó la propuesta que Dmitri le había hecho llegar a través de su hermana y acudió a visitarlo para pedirle plata, poniéndose en una situación delicada e incómoda. Sin embargo, Dmitri no la deshonró ni le faltó el respeto; esto produjo que tiempo después, luego de haberse hecho acreedora de la fortuna de un pariente muerto, se comunicara con él para declararle que lo amaba incondicionalmente. Así se convirtió en la prometida de Dmitri e intentó soportarlo y permanecerle fiel (a él y a sí misma; a su promesa) a pesar de que Iván intentó conquistarla con consentimiento de su hermano mayor.
En ocasiones actuaba de manera impulsiva, lo que la llevaba a colocarse en situaciones incómodas. Un ejemplo es la desafortunada reunión con Gruchegnka, que la engañó para burlarse de ella y le hizo perder la compostura. Sin embargo, tenía inclinaciones virtuosas, como la que le lleva a intentar remediar el daño que su prometido había ocasionado al coronel Snieguiriov.

Catalina Osipovna (señora de Khokhlakov) era una dama rica de pocas luces, propietaria de una de las mejores residencias de la ciudad. Era la madre de Lise, y se opuso desde un principio a la posibilidad de una relación entre su hija y Alexei Fiodorovitch.
Estaba afligida por las dudas y su poca fe. Al igual que Iván, encontraba dificultoso amar a las personas; en su caso, le resultaba más fácil amar a la humanidad como un conjunto que a los seres humanos como entes particulares e individuales. Sin embargo, era sensible y tenía inclinaciones virtuosas. Luego de la muerte de Zósimo, al quien le atribuía cualidades divinas, dejó de creer en los milagros. Sin embargo, la noche en la que Piotr Ilitch la visita para confirmar sus sospechas, su incredulidad flaqueó.

Dardanelov era el maestro de Kolia, un joven soltero que estaba enamorado de la señora de Krasotkine. Le había propuesto casamiento una vez, pero ella o había rechazado.

Dmitri es un cochero al que Iván le encarga que avise a su padre que no irá a Tchermachnia.

Dmitri Fiodorovitch Karamazov (Mitia, Mitka) es uno de los personajes principales de la historia. Hijo de Fiodor Pavlovitch y Adelaida Ivanovna, es el primero de los hermanos Karamazov. Hombre impulsivo, sensual y en ocasiones agresivo, se crió bajo la tutela de una de las tías de Piotr Alejandrovitch y, luego del deceso de la dama, con una de las hijas casadas de la señora. Creció teniendo un concepto falso de su fortuna, y fue engañado al respecto por su padre, que se limitó a otorgarle de tiempo en tiempo pequeñas cantidades de dinero hasta haberle otorgado la suma de sus bienes. Cuando Mitia, que era oficial de la infantería rusa, se enteró de que no tenía derecho a reclamar nada e incluso se había adeudado con su padre, volvió a su tierra natal. Allí conoció a Gruchegnka, de quien se enamoró a pesar de estar comprometido con Catalina Ivanovna. La joven fue una de las principales causas de disputa entre Dmitri y Fiodor Pavlovitch, y uno de los factores que implicaron que Dmitri fuera considerado el principal sospechoso del asesinato del padre.

El doctor Herzenstube era el médico del pueblo. Era considerado el profesional más minucioso de la comarca, y contratado por muchas personas, a pesar de que nunca parecía precisar con seguridad cuáles eran los males que afectaban a las personas. Atendió a Lise, y se mostró asombrado y confundido con la mejora repentina de la muchacha luego de que el starets Zósimo orara frente a ella. Acudió ad honorem a casa del capitán Smieguiriov para ver a Nina Nicolaievna y a Irene Petrovna, y aunque dijo no entender nada, le prescribió algunas medicinas. También se ocupó de visitar a Smerdiakov por orden de Fiodor Pavlovitch cuando Pavel Fiodorovitch se cayó del granero y de las escaleras.

El doctor Varvinski era un joven graduado de la Academia de Medicina de Petersburgo. Cuando un grupo de conocidos con los que estaba pasando la noche partió a Mokroie para detener a Dmitri, él se quedó en casa de Fiodor Pavlovitch para hacerle una autopsia, y porque se interesó por el ataque de epilepsia de Smerdiakov, que llevaba dos días de duración.
Al igual que el doctor Herzenstube y un especialista que Katia había hecho traer de Moscú, prestó declaración en el juicio a Dmitri.

Estefanía Ilinichna Bedriaguine era una rica tendera que ante la preocupación de Prokhorovna por la falta de comunicación de Vasili, le recomendó encargar oraciones por el descanso del alma de su hijo, aún cuando no sabía si Vasili estaba realmente muerto. Este consejo fue severamente sancionado por el starets Zósimo.

Eutimio Petrovich Polienov era un mariscal de la nobleza de la provincia y principal heredero de la viuda del general Vorokhov.
Fue quien se ocupó de la crianza de Alexei e Iván Karamazov, a quienes educó sin emplear los mil rublos que cada niño tenía de herencia. Hombre honrado, fue descrito por Iván Fiodorovitch como alguien impulsado por el amor al bien.

Fedosia Marcovna (Fenia) era una avispada doncella que trabajaba como doméstica de Gruchegnka junto a su abuela, que se encontraba sorda.

Fetiukovitch era un jurista famoso venido de Moscú. Fue el abogado defensor de Dmitri. Perdió el juicio.

Fiodor Pavlovitch Karamazov (Esopo) es uno de los personajes principales de la historia. Hombre inclinado a los placeres sensibles y corrompido, se casó dos veces, y fue padre de los tres hermanos Karamazov. También se cree que fue progenitor ilegítimo de su criado Smerdiakov. En su juventud fue bufón de los nobles; luego de la muerte de Sofía Ivanovna, se mudó a Odesa y acumuló dinero. Más tarde se volvió a trasladar al pueblo, donde, ya terrateniente, se entregó a su mala vida de bebedor lujurioso y siguió actuando como un payaso. Con la llegada al pueblo de sus hijos, que se habían criado lejos de él, se suscitaron disputas entre él y Dmitri por causa de la joven Agrafena Svetlova. Murió asesinado por Smerdiakov.

Grigori Vasielevich Kutuzov era el fiel sirviente de Fiodor Pavlovitch. Estaba casado con Marta Ignatievna y adoraba a los niños. Hombre recto, frío y obcecado, fue quien se hizo cargo de Dmitri cuando Adelaida Ivanovna, hacia quién sentía aversión, se fugó de la casa. También se ocupó de Iván y Alexei cuando murió su madre Sofía Ivanovna, mujer que respetaba profusamente y a la que defendía de Fiodor Pavlovitch. Cuando su hijo nació con seis dedos, se opuso al bautismo por considerarlo un dragón, y se mantuvo frío y alejado. Luego de la muerte del infante, se interesó por asuntos divinos, y se ocupó de criar en su pabellón al hijo de la fallecida Isabel Smerdiachtchaia, Pavel Fiodorovitch.
Grigori sufría ataques de lumbago que lo dejaban paralizados. Marta empleaba una técnica poco profesional para atenderlo.

Hipólito Kirillovitch era el procurador suplente. Fue uno de los integrantes del grupo que detuvo a Mitia bajo la acusación de parricidio, y el fiscal del caso. Murió algunos días después del juicio.

Ilia era el padre de Isabel Smerdiachtchaia; vapuleaba a su hija cada ver que la veía. Viejo viudo y borracho, enfermo y amargado, trabajaba de peón en la propiedad de burgueses.

Iliucha (Barbas de Estropajo) es considerado el personaje protagonista de la trama secundaria más importante de la novela, la relación entre Alexei Fiodorovitch y los niños del pueblo. Era el hijo del capitán Snieguiriov, y asistía a la escuela del pueblo. Cuando al salir de la escuela vio que su padre estaba siendo golpeado por Dmitri, Aliocha acudió al lugar corriendo y suplicando que finalizara la pelea, e inclusive besó la mano del Karamazov. Después del incidente, siguió defendiendo a su padre a pesar de las burlas de sus compañeros, llegando inclusive a herir con un cortaplumas a su amigo Krasotkine por haberse sentido ofendido.
Orgulloso y taciturno, este niño de no más de nueve años se sentía herido por la injusticia de la situación, y tomó rencor hacia la familia Karamazov, por lo que al ver a Alexei Fiodorovitch por primera vez durante una riña con sus compañeros, le hirió con una piedra, y le mordió un dedo.
Iliucha cae enfermo y muere al final de la obra, probablemente por la amargura de la situación que atravesaba con su familia, que aunque a simple vista parece banal, afectó gravemente su estado anímico. Su funeral es narrado en el último capítulo de la historia.

Irene Petrovna era la esposa del capitán Snieguiriov. Se encontraba inválida y sufría delirios, por lo que dependía de los cuidados prodigados por su hija Varvara Nicolaievna. Orgullosa, llamó a Alexei Fiodorovitch "Tchernomazov" cuando este visitó su casa por primera vez.

Isabel Smerdiachtchaia era una mujer retrasada y muda. Era hija de Ilia, pero no tenía relación con su padre, pues éste le pegaba. Isabel solía vagar por el pueblo descalza y vestida únicamente con una camisa. Era cuidada por la gente del lugar, que la recibía en sus hogares y solía darle pan o dinero que ella regalaba o dejaba en la iglesia o en la cárcel. Los pueblerinos también le permitían dormir en sus pórticos o en sus huertos.
Cuando quedó embarazada, en el pueblo se culpó a Karp, aunque existían sospechas sobre la paternidad de Fiodor Pavlovitch. Fue cuidada por la viuda de Kondratiev.
Isabel murió un amanecer luego de dar a luz a un hijo que sería llamado Smerdiakov, debido a las heridas que se produjo al saltar la empalizada que delimitaba la propiedad de los Karamazov.

Iván Fiodorovitch Karamazov (Vanya, Vanka, Vanechka) es uno de los personajes principales de la historia. Era racionalista y ateo. Hijo de Fiodor Pavlovitch y Sofía Ivanovna, es el segundo de los hermanos Karamazov. Luego de la muerte de la viuda del general Vorokhov, fue educado por Eutimio Petrovitch Polienov. Fue un adolescente taciturno que demostró ser muy capaz en el estudio, y sintió durante su infancia que era malquerido por su verdadero padre y estaba siendo criado por Eutinio Petrovitch por misericordia. Durante sus dos primeros años de universidad conoció la pobreza debido a que su protector no supo gestionar correctamente el testamento de la generala. Para ganarse la vida dio lecciones y comenzó a escribir artículos en periódicos. Después de la universidad, Iván se instaló en la casa de su padre, sobre el que ejerció gran influencia.
Fue enviado por Fiodor Pavlovitch a Tchermachnia con el propósito de tramitar con traficantes de árboles, pero prefirió viajar directamente a Moscú, donde permaneció hasta la muerte de su padre. El odio que sentía hacia él hizo que se sintiera culpable de su muerte, sobre todo cuando Smerdiakov, quien le desagradaba profusamente, le confesó su crimen creyendo que había actuado con su aprobación. Todo esto lo llevó a la locura.

Julia era la sirvienta de la señora de Khokhlakov. Fue abofeteada por Lise, quien al rato trató de rectificar sus actos abrazándola.

Karp era un criminal muy peligroso que había escapado de la cárcel del distrito. La gente del pueblo lo creyó responsable de la deshonra de Isabel Smerdiachtchaia, a pesar de que existían sospechas de que el responsable del embarazo de la joven era Fiodor Pavlovitch.

Kartachov era un compañero de Kolia Krasotkine, el único que sabía, al igual que él, quiénes habían fundado Troya.

Kostia era el hijo mayor de la inquilina de la señora de Krasotkine. Tenía siete años y, al igual que su hermano, quería mucho a Kolia.

Kuzma Kuzmitch (Samsanov) era el alcalde de la ciudad. Se rumoreaba que este viudo avaro y astuto tuvo de amante a Gruchegnka, a quien ayudó a salir de su miseria luego de que fuera abandonada por el oficial al que amaba. Vivía con dos hijos casados, una hija asmática y su hermana de avanzada edad en una casa vieja.

Liagavi (Gorstkine) era un mujik esquelético, pícaro y mentiroso proveniente de Pogrebov que se dedicaba al tráfico de madera. Comerciaba con Fiodor Pavlovitch. Intentó comprar el bosque de Tchermachnia, pero no logró llegar a un acuerdo.

Lise era la hija de Catalina Osipovna. Se encontraba enferma de anemia y sufría de fiebres nocturnas. Solía permanecer sentada en un sillón todo el día, pero luego de que el starets Zósimo orara ante ella se fortalecieron sus fuerzas y pudo permanecer de pie algunos minutos. A pesar de su carácter bromista, caprichoso y juguetón, es descrita por su madre como una joven inteligente.
De niña, Lise solía recibir visitas de Alexei Fiodorovitch durante las que él le contaba historias o inventaban cuentos juntos. Años después se enamoró de Aliocha, y ocultó sus sentimientos tras su actitud burlesca. Sin embargo, le escribió una esquela de amor a Alexei que hizo llegar por medio de Catalina Ivanovna. Al final, retiró la palabra de matrimonio que diera a Aliocha, y desarrolló una conducta autodestructiva. (Por ejemplo, se lastimó el dedo con la puerta para castigar su vileza.)

María era una vendedora contestona a la que Kolia saludó llamándola Natacha.

María Kondratievna era la hija de una vieja desvalida. Había servido como camarera en la capital. Volvió al pueblo debido a que su madre estaba enferma. Desde entonces, ambas vivían en la miseria, e iban a diario a la casa de Fiodor Pavlovitch para recibir en calidad de vecinas el pan y la sopa que Marta Ignatievna les brindaba. Sin embargo, a pesar de su pobreza María Kondratievna siempre vestía los elegantes vestidos de cola que había traído de la capital.
Tenía buenas relaciones con Smerdiakov, al punto que gustaba de escucharle cantar y tocar la guitarra, y parecía coquetear con él. Cuando Fiodor Pavlovitch murió, la muchacha vendió su casa y fue a vivir con su madre y Smerdiakov a una isba.

Marta Ignatievna era la esposa de Grigori Vasielevich. Había llegado a la casa de Fiodor Pavlovitch junto a Adelaida Ivanovna; desde la abolición de la esclavitud deseaba abandonar a su amo y abrir una tienda en Moscú con sus ahorros. Sin embargo, y a pesar de ser más juiciosa e inteligente que su marido, Marta se sometía ciegamente a la voluntad de Grigori Vasielevich. Así, luego de recibir por primera y única vez un golpe de su esposo a causa de haber bailado de manera pretenciosa, decidió atenerse a los deseos de Grigori y no danzar nunca más en su vida.
Mujer bondadosa, tuvo un único hijo, enfermizo, que nació con seis dedos y murió a muy temprana edad. Ella se ocupó junto a Grigori Vasielevich del cuidado de Dmitri, Iván y Alexei antes de que otras personas se encargaran de ellos, y también de la crianza de Smerdiakov.

Mateo era un campesino que Kolia y Smurov cruzaron cuando caminaban rumbo a la casa de Iliucha.

Mavra Fominichina era la tía de Piotr Alejandrovitch, y presumiblemente madre de Adelaida Ivanovna. Fiodor Pavlovitch justifica una de sus mentiras relacionada al bautismo de Diderot arguyendo que Mavra Fominichina le había comentado la anécdota.

El terrateniente Maximov era un hidalgo de avanzada edad que guió a Fiodor Pavlovitch y compañía por el monasterio hasta ser interceptado por un monje que los condujo a la presencia del starets Zósimo. Curioso y locuaz, Fiodor Pavlovitch lo comparó con Von Shon, el héroe veterano que después de ser asesinado y desvalijado, fue colocado en un cajón mientras las meretrices cantaban, y enviado a Moscú en un furgón de equipajes.
Maximov aceptó la oferta que le había hecho Fiodor Pavlovitch respecto a abandonar el monasterio e ir a vivir en la residencia Karamazov para disfrutar de los placeres sensibles; intentó subirse al carro donde viajaban Iván y su padre, pero fue rechazado por el joven.
Se encontraba en el albergue de Trifón Borisytch cuando Mitia llegó buscando a Gruchegnka. Cuando Dmitri fue arrestado, Maximov volvió con Gruchegnka al pueblo y no se separó de ella.

Micha era el criado de Piotr Ilitch. Fue a cambiar dinero con los Plotnikov por orden de Mitia, cuando este se propuso pagarle al funcionario para desempeñar sus pistolas.

Miguel era un hombre taciturno que Zósimo conoció durante su juventud. Cuando joven, Miguel había asesinado a una mujer conocida. Había cargado con la culpa por años, conviviendo con el deseo de entregarse. Para redimirse se había realizado multitud de actos altruistas. Finalmente había logrado reconstruir su vida formando una familia, pero tras conocer lo que Zenob había dicho durante el duelo, y haber conversado con el joven y confesado su crimen, decidió admitir lo hecho públicamente por recomendación del futuro starets. Murió unos días después de su confesión, sin que la gente le creyera.

El ispravnik Mikhail Markarovitch era un teniente coronel retirado que había pasado a ser consejero de la corte. Fue uno de los integrantes del grupo que detuvo a Mitia bajo la acusación de parricidio.

Mikhail Ossipovitch Rakitine (Micha, Rakitka) era un seminarista que frecuentaba el monasterio. Era un joven ingenioso, algo inseguro y envidioso, por lo que solía exagerar sus dotes intelectuales. Tenía muchos conocidos que le permitían satisfacer su curiosidad, pero despreciaba a muchos de ellos. Iván le resultaba particularmente desagradable.
Intentó conquistar a la señora de Khokhlakov para casarse con ella y disponer de su fortuna, pero debido a un altercado con Perkhotine la mujer lo echó de su casa.
Rakitine fue a visitar a Mitia a la cárcel frecuentemente para poder realizar un artículo sobre su crimen a fin de presentarse como escritor. Durante el juicio, fue completamente humillado por su prima, Gruchegnka.

El monje Antinio era uno de los religiosos del monasterio. Este anciano amigo de Zósimo era un hombre humilde y poco instruido, que había recorrido Rusia con el starets por años.

El monje de Obdorsk era un monje proveniente de Obdorsk, un pueblo ubicado al norte de la ciudad donde transcurrían los hechos. Pertenecía al monasterio de San Silvestre, lugar de pequeño tamaño que contaba con solo nueve monjes. Allí se observaban regímenes de alimentación estrictos que eran realizados de acuerdo a antiguas costumbres ascéticas.
Al llegar al monasterio de la ciudad, este religioso de carácter humilde, curioso y obstinado rindió homenaje al starets Zósimo cuando este se encontraba en presencia de la señora de Khokhlakov. Luego, en la tarde del mismo día visitó y conversó con el Padre Theraponte, hacia quien sentía algo de temor por su reputación. Sintió estima hacia el padre asceta, principalmente debido a que ambos compartían la apreciación por el ayuno y el desagrado por el staretismo.

Nastaniuchka era una ciudadana que después de haber visitado tres monasterios distintos, recorrió varias vestas para ver al starets Zósimo. Se encontraba destrozada por la muerte de su hijo Alexei, que había fallecido antes de cumplir los tres años. Habiendo perdido al último de sus cuatro hijos, y no pudiendo encontrar consuelo en las afirmaciones de su marido, Nastaniuchka lo abandonó para partir en busca de algo que lograra calmar su dolor, cargando consigo una prenda de su bebé. El starets la comparó con la figura de Raquel, le dijo que no se consolara y, luego de prometerle que oraría por el niño perdido, le instó a que volviera junto a su esposo Nikituchka.

Nastia era la hija mayor de la inquilina de la señora de Krasotkine. Tenía ocho años y sabía leer. Adoraba a Kolia.

Nazario Ivanovich era el portero de la casa de la señora de Morozov. Fenia hablo con él luego de encontrarse con Dmitri tras la huída de Gruchegnka para pedirle que no dejara entrar a Mitia por dos días. Olvidó avisarle de esto a su sobrino cuando lo dejó al cuidado de su puesto.

Nicolás Ilitch Snieguiriov era un capitán de la segunda infantería rusa que había sido destituido por haber cometido una falta, y vivía a causa de ello en la pobreza. Descarado, cobarde y vicioso, Snieguiriov estaba casado con Irene Petrovna y era padre de Varvara, Nina e Iliucha. Vivía en la casa de la señora de Kalmykov.
Snieguiriov era informante de Fiodor Pavlovitch; fue vapuleado por Dmitri, quien lo cogió por la barba en un bar y lo arrastró a la calle para pegarle cuando se enteró de que había intervenido en una intriga destinada a crearle deudas con su padre. Su participación en el asunto y la golpiza recibida trajeron vergüenza a la familia. No realizó la denuncia porque Agrafena Alejandrovna lo amenazó con despedirlo e influir para que lo despidiera otra persona para la que trabajaba, lo cual acrecentaría su miseria, puesto que Fiodor Pavlovitch también le había retirado la confianza.
Catalina Verkhovtseva le ofreció plata a través de Alexei Fiodorovitch. Al principio Snieguiriov no aceptó la protección de la joven, pero al final acabó desistiendo.

Nicolás Ivanovitch Krasotkine (Kolia) era un amigo de Iliucha. Travieso e inteligente, se preocupaba mucho por las impresiones que daba a los demás. Fue quien encontró a Escarabajo -un perro callejero al que Iliucha creía haber herido por seguir un consejo cruel de Smerdiakov- y lo devolvió a su amigo tísico luego de haberlo amaestrado.

Nicolás Parthenovitch Neliudov era un joven y libertino juez de instrucción que perteneció al grupo que detuvo a Mitia bajo la acusación de parricidio.

Nikituchka era el esposo de la desconsolada Nastaniuchka, la peregrina que acude ante Zósimo, Nikituchka trabajaba de cochero. Intentó consolar a su cónyuge diciéndole que su hijo Alexei estaba junto al Señor, pero no obtuvo resultado y fue abandonado por su esposa. Nastaniuchka cree que ante su ausencia su marido se volcó a la bebida, porque solía hacerlo cuando se sentía abandonado por ella o perdía los ánimos.

Ninotchka Nicolaievna (Nina) era una de las hijas del capitán Snieguiriov e Irene Petrovna. Se encontraba imposibilitada a causa del reumatismo; era inválida, jorobada, y sufría de terribles dolores. Sin embargo, disimulaba su sufrimiento, e intentaba no causar molestias a su familia.
Su padre la llamó "ángel encarnado", al igual que a Varvara Nicolaievna.

El novicio Porficio era uno joven religioso del monasterio. Se sentía apenado por la evidente preferencia de Zósimo por Alexei Fiodorovitch.

Olga Mikhailovna era la hija menor del ispravnik Mikhail Markarovitch.

El padre Abad era un religioso perteneciente a la nobleza que invitó a los Karamazov y a sus acompañantes a un almuerzo. Conservó la serenidad ante la desfachatez de Fiodor Pavlovitch y las réplicas exasperadas de Piotr Alejandrovitch. Tenía la costumbre de repetir frases relacionadas con su doctrina religiosa ante las ofensas que recibía, evitando perder la humildad o dejarse llevar por la soberbia o arrebatos pasionales violentos.

El padre Ilinski era un sacerdote joven y reservado, protegido de Fiodor Pavlovitch, que condujo a Mitia ante la presencia de Liagavi en Posielov.

El padre Isidoro era uno de los religiosos del monasterio. Estuvo presente en el almuerzo ofrecido por el abad a Piotr Alejandrovitch y compañía. Se indignó profundamente por la interrupción y falta de respeto de Fiodor Alejandrovitch, y reaccionó gritando al bufón y si hijo Iván, que huían corriendo al coche.

El padre José era uno de los religiosos del monasterio. Amigo del starets Zósimo, ese bibliotecario estuvo presente en la reunión con el starets y el almuerzo ofrecido por el abad. Intervino en la discusión que se suscitó respecto al artículo de Iván Fiodorovitch sobre los tribunales eclesiásticos, realizando aclaraciones y comentarios de poca envergadura.

El padre Miguel era uno de los religiosos del monasterio. Amigo del starets Zósimo, era un hombre firme que disimulaba su ternura.

El padre Paisius era uno de los religiosos del monasterio. Amigo del starets Zósimo, en quien confiaba mucho, estuvo presente en la reunión con el starets y el almuerzo ofrecido por el abad. Erudito de carácter taciturno y en apariencia severo, este hombre enfermizo fue vehemente en algunas afirmaciones realizadas durante la discusión con Iván Fiodorovitch respecto a su artículo sobre los tribunales eclesiásticos. No solía abordar los asuntos con rodeos; así, cuando tuvo que aconsejar a Alexei Fiodorovitch contra las tentaciones, lo hizo sin preámbulo alguno.

El padre Theraponte era uno de los religiosos del monasterio, adversario del staretismo. El anciano Theraponte, que vivía en un pequeño recinto que había sido diseñado para un ayunador llamado Jonás, solía ser grosero y parco con aquellos que lo visitaran. Tenía conductas ascetas, y era considerado por muchos justo y loco; además, se creía que tenía relación con espíritus celestiales, creencia que él verificaba con los relatos que hacía de sus experiencias con los demonios.
Se presentó al velorio de Zósimo gritando para ahuyentar a los demonios que él creía pululaban en la sala. Discutió con el padre Paisius respecto de las actitudes del fallecido starets en lo concerniente a las prácticas religiosas. Tras realizar un enorme escándalo y ser echado por el padre Paisius, abandonó el lugar del velorio y terminó llorando y aclamando al Señor mientras muchos lo declaraban santo.

“Pan” Musalowicz era el ex-amante polaco de Gruchegnka. Al igual que su compañero, el pan Wrubleski, hizo trampa al jugar con cartas señaladas en Mokroie. Los doscientos rubros que ganaron los gastaron rápidamente y quedaron en la miseria. Desde entonces pidieron dinero a Gruchegnka.

“Pan” Wrubleski era un polaco de actitudes desdeñosas que junto a su compañero, el ex - amante de Gruchegnka, hizo trampa al jugar con cartas señaladas contra Dmitri y compañía en Mokroie. Era dentista.

Pavel Pavlovitch Korneplodov era un abogado famoso. Fue consultado por Dmitri Karamazov con respecto a la aldea de Tchermachnia.

Pavel Fiodorovitch Smerdiakov era el hijo de la muda Isabel Smerdiachtchaia. Fue criado por Grigori Vasielevich y Marta Ignatievna. De niño disfrutaba hacer daño a los gatos. Comenzó a sufrir epilepsia a los doce años, días después de recibir un bofetón de Grigori por haber hecho un comentario mordaz sobre las enseñanzas religiosas que el fiel criado de Fiodor Pavlovitch intentaba inculcarle. Unos años después fue enviado a Moscú para aprender cocina; desde su regreso al pueblo cocinó para los Karamazov.
Pavel Smerdiakov, a quien su amo apodó la burra de Balaam, era insociable, taciturno y arrogante. Compartía el ateísmo de Iván Fiodorovitch, a quien admiraba y despreciaba a la vez.
Fue el autor del asesinato de Fiodor Pavlovitch, hecho que confesó a Iván creyendo que había contado con su aprobación.

Piotr Alejandrovitch Miusov era el primo de Adelaida Ivanovna. Era un joven educado, librepensador, ateo, y declarado occidentalista. Cuando se mudó al pueblo donde transcurre la historia, Piotr Alejandrovitch entabló procesos legales con el monasterio por la posesión de los derechos de pesca y tala de árboles y por la delimitación de tierras.
A pesar de detestar a Fiodor Pavlovitch, al enterarse de la muerte de su prima Miusov se hizo cargo de Dmitri, a quien confió a sus tías de Moscú cuando hubo de mudarse a París. Unos años después volvió al pueblo y conoció a los hermanos Karamazov, rivalizando en erudición con Iván Fiodorovitch. Intervino en la reunión celebrada en la celda del starets Zósimo con el aparente motivo de la disputa entre Dmitri y su padre por la herencia de Adelaida Ivanovna, a la que asistió por curiosidad acompañado por Piotr Fomitch Kalganov.

Piotr Fomitch Kalganov era un joven de veinte años que era pariente lejano de Piotr Alejandrovitch, con quien vivía. Se preparaba para ingresar a la universidad. Asistió a la reunión celebrada en la celda del starets Zósimo en compañía de su pariente. De carácter a veces excitable y a veces taciturno, se mostró turbado ante las peticiones de los mendigos, y dio limosnas a una mujer con la indicación de que la compartiera. Piotr Fomitch mantenía relaciones amistosas con Alexei Fiodorovitch.
Se encontraba en el albergue de Trifón Borisitch cuando Mitia llegó buscando a Gruchegnka.

Piotr Ilitch Perkhotine era un funcionario apasionado por las pistolas al que Dmitri empeñó dos de sus armas por diez rubros. Acompañó a Mitia a lo de los Plotnikov luego de que éste volviera pocas horas después para recuperar sus pistolas y lo invitara. Fue uno de los primeros en desconfiar de Dmitri, dad la cantidad de plata que había logrado obtener en pocas horas.

Los Plotnikov eran comerciantes ricos poseedores de la mejor tienda de comestibles de la localidad.

Prokhorovna era la viuda de un suboficial que acudió ante el starets Zósimo para preguntar la modalidad a seguir ante la incomunicación de su hijo Vasili. El joven no había dado señales de vida por un año, y Prokhorovna, preocupada por el consejo que le había proporcionado Estefanía Ilinichna, se dirigió al starets para inquirir si la práctica que le habían recomendado era correcta. Prokhorovna escuchó el consejo de Zósimo, que le recomendó rogar por la salud de Vasili a la Reina de los Cielos, y tiempo después recibió una misiva de su hijo donde le informaba que regresaría a Rusia pronto.

Smurov era un conocido de Kolia, hijo de un funcionario acomodado. Formó parte del grupo que apedreó a Iliucha. Fue el primero en acompañar a Aliocha a ver al niño tísico para reconciliarse.

Sofía Ivanovna (la "endemoniada") fue la segunda esposa de Fiodor Pavlovitch, y madre de Iván y Alexei.
La joven era la hija de un diácono que murió cuando ella era todavía una niña. Se crió junto a la estricta viuda del general Vorokhov, y debido a los reproches de la señora, intentó suicidarse. Se casó a los dieciséis años con Fiodor Pavlovitch, a quien no conocía, para huir de su bienhechora. Mujer dulce y de carácter delicado, Sofía Ivanovna fue miserable junto a su marido, que realizaba orgías en el hogar con meretrices, y sólo obtuvo apoyo de parte de Grigori. Debido a su desdicha y al terror, la joven contrajo una enfermedad nerviosa que le valió el calificativo de "endemoniada". Sofía Ivanovna falleció cuatro años después del nacimiento de Alexei.

Mavriki Mavrikievitch Chmertsoy fue uno de los integrantes del grupo que detuvo a Mitia bajo la acusación de parricidio. Había llegado a la ciudad para cobrar su sueldo. Fue enviado a Mokroie y se le encargó la vigilancia del Dmitri Karamazov.

La tía Ágata era una de las mujeres que vivían con Catalina Ivanovna en su residencia del pueblo.

Timoteo era el cochero que llevó a Gruchegnka a Mokroie, el lugar donde se encontraba el oficial al que había amado.

Los traficantes Maslov eran los principales compradores de la tala de en la zona. Padre e hijo eran ricos debido a sus negocios, y sus condiciones no solían ser desatendidas por nadie.

Trifón Borisytch era el dueño de un parador en Mokroie. Era conocido de Mavriki Mavrikievitch Chmertsoy.

Tuzikov era uno de los compañeros de Kolia, a quien aventajaba en altura.

Varvara Alexeievna era la patrona de los empleados de los Plotnikov.

Varvara Nicolaievna era la hija del capitán Snieguiriov e Irene Petrovna. Estudiaba en Petersburgo; volvió con su familia en el verano con dieciséis rublos que había ganando dando lecciones. Esta plata estaba destinada a pagar su regreso a Petersburgo, pero fue gastada por su familia, lo cual la hizo amargarse. Durante su estadía en la ciudad se ocupó de las labores domésticas y el cuidado de su madre y hermana. De carácter algo arrogante y despectivo, se exasperaba fácilmente, y solía llamar "payaso" a su padre.

El Teniente Coronel Verkhovtseva era un caballero que ostentaba un rango superior al de Dmitri Fiodorovitch en la infantería rusa. Se había casado dos veces; producto de esos dos matrimonios fueron sus hijas Ágata Ivanovna y Catalina Nicolaievna. Sentía aversión hacia Dmitri Fiodorovitch, por lo que solía tratarlo con dureza. Tenía la costumbre de retirar dinero de la caja luego de las inspecciones de los jefes de división, y entregarlo a un hombre de su confianza llamado Trifinov, quien negociaba con el dinero en las ferias y lo devolvía enseguida a teniente coronel. Durante su vejez aparecieron sospechas de malversación de fondo, por lo que tuvo que dimitir del cargo. En esa ocasión, Trifinov no le devolvió el dinero que le había prestado, por lo que ante la presión el teniente intentó suicidarse infructuosamente, debido a la oportuna intervención de su hija Ágata. Gracias a un préstamo de Dmitri a Catalina Ivanovna el coronel pudo devolver el dinero faltante, pero poco después enfermó y murió a causa de un reblandecimiento cerebral.

La viuda de Kondratiev era una mujer rica que alojó en su casa a Isabel Smerdiachtchaia durante su embarazo.

La viuda del comerciante Morozov era una mujer de edad que vivía con sus dos sobrinas solteras. Para complacer a un pariente suyo, Samsanov, tomó como inquilina a Gruchegnka.

La viuda del general Vorokhov fue la protectora de Sofía Ivanovna luego de la muerte del padre de la joven y hasta su casamiento. Es descrita como una dama acaudalada de gran prestigio y carácter crítico. Se enfureció luego de que su protegida contrajera nupcias, por lo que se negó a otorgarle dote y la maldijo.
Luego de la muerte de Sofía, la generala retiró a Iván y Alexei del pabellón donde permanecían sucios y mal vestidos, no sin antes abofetear a Fiodor Pavlovitch y a su criado Grigori Vasielevich. Dispuso que luego de su muerte los infantes recibieran mil rublos cada uno para su educación.

Zósimo el starets (Zenob) era el guía espiritual del monasterio, que ocupaba la ermita de su predecesor el starets Balsanufe y era admirado por mucha gente y rechazado por algunos colegas religiosos. Era venerado por Alexei Fiodorovitch; muchacho del que fue maestro durante su estadía en el monasterio. Aliocha presume que el starets moribundo dispuso que el padre Paisius se encargara de su cuidado espiritual.
A Zósimo se le adjudicó un "milagro de predicción" debido al consejo que le otorgó a Prokhorovna en lo referido a la metodología a seguir debido a la incomunicación su hijo Vasili.
Zósimo había nacido de padres nobles de modesta condición. Tenía un hermano mayor llamado Marcel, que murió a los diecisiete años de edad admirando la creación.
Luego de la muerte de su hermano, Zenob fue enviado a Petersburgo para enrolarse en el cuerpo de cadetes, donde pasó casi ocho años. En sus años de juventud buscó duelo con el marido de una joven dama, pues sentía celos hacia el señor. Sin embargo, antes del duelo cambió su forma de ver al mundo, luego de haberle pegado a su ordenanza Atanasio y recordado las palabras de su hermano Marcel, por lo que pidió perdón públicamente y abandonó el cuerpo de cadetes para convertirse en monje.
Tras años dedicado a su vocación religiosa, murió apaciblemente mientras conversaba con sus allegados. Durante el velorio su cuerpo comenzó a heder, lo que alimentó las acusaciones de sus detractores. Lo ocurrido durante su inhumación impresionó vivamente a Alexei Fiodorovitch.
El starets Zósimo cumple la función de refutar el ateísmo de los algunos personajes del libro como Iván mediante su espiritualidad.



Y una cosita más...


Skotoprigonievsk es el nombre de la localidad donde ocurren los hechos.